Chrysis ignita es un característico representante de la familia Chrysidae, la de las avispas doradas, de colores brillantes. Posee tamaño variable de 4 a 13 mm. Vista por encima, la cabeza y el tórax son de color verde azulado, a veces con reflejos dorados, mientras que el abdomen es rojizo. La larva es ectoparásita de otras especies de himenópteros, en especial de avispas de la família Euminidae.
Los crísidos combinan normalmente dos o tres colores: verde, amarillo y carmesí son los más frecuentes. Por ello reciben los nombres vulgares de moscas o avispas doradas o de fuego. Los crísidos son parasitoides de otros himenópteros. Los crísidos adultos ponen los huevos en el nido de un anfitrión y las larvas que de ellos nacen devoran las del anfitrión. Por este motivo, en otras lenguas se conoce a los crísidos como avispas cuco: cuckoo wasps en inglés, guêpes-coucous en francés,… Los crísidos adultos, si son atacados, se enrollan formando una bola, quedando protegidos por la gruesa cutícula de la parte dorsal del cuerpo.
[foto Xavier Adot]