Roña del peral, sarna del peral

Venturia pyrina

La roña o sarna del peral es una fitopatología causada por el hongo Venturia pyrina en los perales (Pyrus communis) -su huésped más habitual y que muestra la imagen-, y que con menor prevalencia puede afectar también a los manzanos (Pyrus malus [= Malus domestica]), a los nísperos de Japón (Eriobotrya japonica) y quizás a algún otro árbol frutal más de la familia de las Rosáceas. Con el nombre científico de Venturia pyrina se conoce al teleomorfo o fase sexual del ciclo vital del hongo, mientras que el anamorfo o fase asexual se conocía ya antes con el nombre de Fusicladium virescens (= F.pyrorum). El anamorfo es la forma que causa la infección grave en el peral.

Los síntomas de la infección son la aparición de manchas circulares oscuras en las hojas y en los frutos. Las manchas en las hojas comienzan pálidas, poco perceptibles, pero progresivamente se oscurecen hasta quedar negras. Las hojas más afectadas caen prematuramente. Las manchas en los frutos son ya de entrada negras y muy visibles, de unos pocos milímetros de diámetro y con margen irregular. Las frutas afectadas suelen mostrar también grietas y deformaciones. Estas manchas oscuras en las hojas y principalmente en las frutas están llenas de conidios que liberan las conidiósporas que extienden la infección. La infección progresa también en las frutas recogidas o caídas en el suelo, por lo que dejar la fruta infectada en el huerto es garantía de persistencia de la infección al año siguiente.

Las primaveras lluviosas y la humedad ambiental alta favorecen la expansión de la roña del peral. Se combate mediante la aplicación de fungicidas preventivos antes de la floración.

[foto Jordi Badia]