Anthophora romandii es una abeja de la subfamilia Anthophorinae, con un cuerpo piloso que recuerda al de los abejorros del género Bombus. Su cuerpo es negro exceptuando el tórax y la cabeza que se encuentran cubiertos por una pilosidad gris pálido. Aparece a principios de primavera y presenta una única generación a lo largo del año. Las hembras excavan los nidos en suelos arcillosos con poca cobertura vegetal o en caminos forestales, unos cerca de otros, fácilmente reconocibles porque alrededor de la entrada amontonan la arcilla formando un anillo. Al volar emiten un zumbido algo estridente y grave. A menudo se muestran desafiantes encarándose suspendidas en el aire durante unos instantes.
La subfamilia de himenòpters Anthophorinae, incluida actualment en la familia Apidae y hasta hace poco considerada con rango de familia bajo el nombre Anthophoridae, comprende 15 géneros, entre los que destacan Anthophora, Eucera, Xylocopa, Ceratina, Nomada y Melecta. Los cuatro primeros géneros corresponden a abejas solitarias recolectoras de polen y néctar. Las hembras transportan el polen en escopas con abundante pilosidad situadas en las patas posteriores. En cambio, los dos últimos géneros corresponden a abejas cleptoparásitas, es decir, parásitas de otros nidos de abejas. Las hembras de estas especies no presentan escopas. Además, los individuos el género Nomada se parecen a avispas.
[fotos Xavier Adot]