El durillo (Viburnum tinus), como la mayoría de los arbustos del encinar y de la maquia, retoña de raíz después de un incendio.
En la imagen 1ª, un retoño de durillo transcurridas 10 semanas del incendio de Ódena, El Bruc, Castellfollit del Boix y San Salvador de Guardiola. En las imágenes 2ª y 3ª, retoños de durillo un año y medio después del incendio.
El durillo puede recuperar en pocos años el volumen que tenía antes del fuego. Los rebrotes son siempre más abundantes en la umbría que en la solana donde, a sus condiciones desfavorables, hay que añadir un número de arbustos menor ya antes del incendio.
[foto Jordi Badia]