El municipio de L’Estany, en la parte alta de la comarca de Moianès y que hasta el 2015 perteneció a la de Bages, debe su nombre al estanque natural que antiguamente ocupaba el llano alargado en la entrada sur de la población, llegando desde Moià. Este llano, a 865 metros de altitud, está rodeado de sierras que lo convierten en endorreico, aunque por poco; cerca de su extremo sur nace el arroyo de Castellnou, de la cuenca del río Calders, y del norte el arroyo de L’Estany, de la cuenca de la Gavarresa. El estanque natural se mantuvo hasta 1737. Intentos previos para desecarlo mediante canales de desagüe, con los objetivos de mejorar la salubridad del lugar y conseguir tierras de cultivo, fracasaron por su pendiente insuficiente.
En el año 1734, el maestro de obras Josep Pasqual recibió de los canónigos de las catedrales de Vic, Barcelona y Gerona –las cinco dignidades reales- el encargo de la construcción de una mina o galería subterránea que desecara definitivamente el estanque, según una obra de ingeniería que había ideado Josep Morató, maestro de obras de Vic. Debido a las dificultades de los trabajos acordados a un plazo prefijado muy breve, en julio de 1735 Josep Pasqual renunció al contrato. Josep Terricabres, segundo de Josep Pasqual, se hizo cargo de las obras con la ayuda de los maestros Josep Morató y Pere Calvet. La obra finalizó exitosamente en 1737, dentro del plazo previsto.
La Mina, como se denomina en la población de L’Estany, es una galería de 425 metres de longitud y unos 2 metres de alto por 1 de ancho, revestida casi totalmente en piedra seca y con bóveda de cañón en el techo. La boca sur, por la que entra el agua, está en el extremo del canal mayor del estanque, mientras que la boca norte está bajo el Pontarró, el puente por donde el camino entre L’Estany y Vic cruza el arroyo de L’Estany en el que la Mina vierte el agua. Su desnivel es de 3 metros, suficientes para evacuar el agua. La Mina dispone de diversos pozos de ventilación verticales. Desde 1737, sin interrupción, la Mina desagua el llano al sur de L’Estany.
Actualmente, el llano inundable está ocupado por campos de cultivos delimitados por zanjas a cuyo alrededor se forman pequeños humedales. El agua aflora por el suelo, en mayor o menor cantidad dependiendo de la pluviosidad. El croar de las ranas recuerda continuamente que el llano húmedo había sido un estanque de considerable extensión. Para recuperar el estanque, sería suficiente con obturar la entrada a la Mina.
En el año 2011 se iniciaron trabajos de limpieza, restauración y adaptación de la Mina para que pudiera ser visitable. Desde diciembre de 2019, se accede a un tramo de la Mina, desde su boca norte o del Pontarró hasta uno de los pozos de ventilación, en visita guiada.
En las imágenes 1ª y 2ª, el llano que ocupó el estanque, ahora una zona con cultivos y humedales, y, en la 3ª, la Mina que lo desagua.
[fotos Jordi Badia]