La erosión diferencial ha formado diversos abrigos naturales en la vertiente de Les Brucardes sobre el río Llobregat, la continuación al norte del risco de Les Marcetes y de Roca Tinyosa, en el municipio de Sant Fruitós de Bages. En uno de los abrigos situado casi al nivel de la urbanización de Les Brucardes se descubrió, hace unos años, la presencia de pinturas rupestres. Se llega al abrigo por el camino entre la fuente de la Tolega y el llano de los Rovellons que rodea la urbanización por el este, en cuyo tramo más vertical y dificultoso se ha instalado recientemente una escalera.
Les pinturas están realizadas en un ocre rojizo. Representan de forma esquemática un sol o una estrella, unas manos (¿o quizás las primeras 4 barras de la bandera catalana?) y diversas figuras de animales. Se estima que datan del final del Neolítico, alrededor del año 3500±500 aC. Cuando se plasmaron las pinturas en la pared, el techo del abrigo sería más extenso. Más tarde, la parte exterior del techo se derrumbó, como atestiguan los bloques de roca caídos y aún con aristas afiladas en las caras por las que se desprendieron. El lugar encarado al este y dominante sobre el valle del Llobregat debió ser cómodo.
La Dirección General de Patrimonio Cultural de la Generalitat de Catalunya ha declarado estas pinturas, las únicas conocidas en la Catalunya central, Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) y las ha protegido mediante una valla metálica alrededor del abrigo para impedir el acceso incontrolado.
Las fotos muestran el detalle de las pinturas rupestres y el recinto vallado visto por arriba y por debajo.
En la foto 1ª se aprecian bolas de cañón en la roca arenisca. Precisamente, una de estas bolas de cañón seccionada diametralmente enmarca la pintura que interpretamos como un sol.