Los abrigos de Puig Cardener

Puig Cardener (o escrito Puigcardener) es el cerro de arenisca estratificada, recortado al sur por el río Cardener y al este por el torrente de San Ignacio, sobre el que se alza majestuosa la basílica gótica de Santa María de la Seo de Manresa. El Puig Cardener es el lugar dominante, luminoso, con buenas vistas y con dos vertientes escarpadas que se defienden por sí solas donde se estableció el primer asentamiento de población que origina la ciudad de Manresa. Puig Cardener es también un bastión fronterizo de las rocas eocénicas duras, de origen marino y color claro que se extienden hacia el suroeste; a unos centenares de metros al norte, en la plaza de Santo Domingo o en el Puig Mercadal donde se encuentra la iglesia del Carmen, la roca es ya de origen continental y color rojizo, en general no tan dura y por tanto poco propensa a relieves tan abruptos.

La mayor resistencia de dos capas gruesas de la roca arenisca de Puig Cardener ha propiciado la formación de sendos niveles de abrigos naturales o grutas que rodean las laderas escarpadas encaradas hacia el río Cardener y el torrente de Sant Ignasi. Estos abrigos no son muy seguros, por lo que históricamente se han reforzado con paredes. El Camí dels Corrals (= camino de los Corrales), desde la plaza de la Reforma hasta la vía de San Ignacio, sigue por la base del nivel inferior de abrigos. Estos pequeñas abrigos se han utilizado como cobijo de urgencia y en funciones menores como establo para el ganado, a lo que alude el nombre de Camí dels Corrals. Contrasta la solemnidad de la Seo de Manresa con la humildad de las grutas sobre las que se alza.

[foto Jordi Badia]