Anisantha diandra (= Bromus diandrus) es una hierba gramínea anual de porte alto, normalmente por encima del medio metro de altura a pesar de sus tallos delgados y encorvados, muy común en los herbazales con suelo profundo en márgenes de caminos.
Se le atribuyen los nombres populares en español de rompesacos, zarigüeyes, barba de macho o espiguillas, aunque ninguno de ellos es realmente utilizado ni identifica exclusivamente a Bromus diandrus. La discriminación entre las especies del género Bromus, algunas de las cuales recientemente se han separado para incluirlas en el género Anisantha, requiere atención detallada a caracteres morfológicos; no es de extrañar pues que, a pesar de ser una hierba común, no tenga ningún nombre popular bien establecido. Entre los botánicos, el nombre científico tradicional Bromus diandrus es el más arraigado, por lo que lo utilizamos aquí.
Bromus diandrus posee hojas de 4-6 mm de ancho, pubescentes y con una lígula oblonga. Los tallos son también pilosos, principalmente en su parte baja y en las vainas foliares. Estos tallos culminan en una panícula de 15-25 cm, laxa, constituida por 4-5 verticilos distantes de 3-7 espículas o espiguillas sostenidas por pedicelos delgados de longitudes desiguales, de unos 5 cm los más largos. Las glumas de las espiguillas son netamente desiguales: la gluma inferior mide unos 15 mm y tiene un único nervio, mientras que la gluma superior mide unos 24 mm y tiene 3 nervios. Ambas glumas comparten la forma estrecha y afilada con una punta larga. Las glumas dan paso a 4-7 flores, todas con una arista lineal de 5-6 cm, dirigida hacia delante y poco divergentes en una misma espiguilla. La arista nace en el seno de un lema bífido y, al pasar el dedo de la punta hacia la base, se aprecia su tacto escabro debido a la presencia de aculéolos dirigidos hacia adelante y visibles a simple vista. El conjunto de la espiguilla tiende a ensancharse ligeramente de la base hacia el ápice.
Bromus diandrus forma poblaciones abundantes allá donde se encuentra. Fácilmente puede entrar en los campos de cereales donde es considerada una maleza; en cambio, es una planta bienvenida en los prados de pasto.
[fotos Jordi Badia]