El colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros) vive en todo tipo de relieves abruptos y rocosos, desde el nivel del mar hasta la alta montaña, incluyendo las construcciones humanas para nidificar. No es raro encontrarlo en los parques y jardines de la ciudad o de las urbanizaciones.
Los ejemplares de las imágenes 1ª, 2ª, 9ª y 10ª son hembras de plumaje amarronado, los de las imágenes 3ª y 4ª juveniles y los de las imágenes 5ª, 6ª, 7ª y 8ª son machos que se distinguen por su tono más negro con una mancha blanca en las alas.
[fotos Oriol Oms (1ª), Jordi Badia (2ª, 3ª, 5ª, 6ª, 7ª, 8ª, 9ª y 10ª) y Montserrat Porta y Jordi Badia (4ª)]