Garbancera

Ononis fruticosa subsp. fruticosa

La garbancera (Ononis fruticosa subsp.fruticosa) es un arbusto poco común que crece principalmente en claros de robledales secos, sobre suelos pobres, sin llegar al extremo de ser gipsícola como su congénere el arnacho (O.tridentata).

Las hojas de la garbancera son compuestas, con tres folíolos sésiles de forma obovada o lanceolada y margen dentado en todo su contorno. En la base de las hojas se encuentran estípulas constituidas por una vaina que envuelve el tallo y termina en dos puntas que asoman por el costado opuesto al de la hoja. Si el verano es muy seco, las hojas caen prematuramente; entonces queda el tallo desnudo adornado con los anillos de estípulas de consistencia finalmente papirácea. La garbancera florece en primavera avanzada y en verano. Las flores se disponen en corimbos en la punta de las ramas. Estas flores tienen un pedúnculo corto, un cáliz inicialmente verde y finalmente rojizo formado por 5 sépalos estrechos y pilosos, y una corola de unos 10-15 mm de color rosa intenso, muy vistosa, que protege en su interior a los estambres y al pistilo. El fruto es una legumbre pilosa, de unos 20 mm de longitud y sección cilíndrica.

En la comarca del Bages se encuentra solamente en terrenos rojizos de la formación geológica Artés. Su distribución es disjunta; se encuentra en pocas localidades, aunque en ellas suele conseguir poblaciones grandes. Hemos observado a la garbancera en Gaià, en Santa Maria d’Oló, en Castelltallat, en el arroyo de Jaumandreu, en la Sierra de Rajadell y en Grevalosa.

[fotos Jordi Badia (1ª, 2ª, 3ª, 4ª y 5ª) y Víctor Manuel Vicente (6ª)]