Ononis reclinata es una hierba anual pequeña de 15-25 cm de altura, de la familia papilionáceas. Se reconoce por su pilosidad clara, blanquecina, sedosa y parcialmente glandulosa que en los sépalos se acentúa en pelos más largos, y por sus flores de corola rosada que apenas sobresale más allá de los sépalos largos. Las hojas son mayoritariamente trifolioladas, con estípulas en la base, un pecíolo de 6-8 mm, y folíolos también de 6-8 mm en forma de cuña, el central peciolulado, casi truncados en el ápice y dentados sólo en el tercio apical. Muchas de las hojas que llevan una flor tienen sólo el folíolo central. Las flores nacen solitarias en la axila de estas hojas simples. Las flores tienen un pedúnculo de hasta 15 mm de longitud, algo más largo que los peciolos de las hojas, que en su extremo se curva para dejar la flor inclinada hacia abajo -a lo que se refiere el adjetivo específico reclinata. La flor tiene un cáliz de 5 sépalos estrechos, agudos y pilosos, de 5-7 mm de longitud, y una corola pequeña y rosada, encerrada entre los sépalos. La legumbre es corta, de 4-10 mm, pilosa y péndula como la flor.
Ononis reclinata desprende un olor intenso y poco agradable.
Ononis reclinata vive en los prados temporales sobre tierra fértil que en primavera se forman en los márgenes del bosque.
[fotos Jordi Badia]