La polígala de roca o rupestre (Polygala rupestris) es una mata pequeña, con la base leñosa y los tallos jóvenes con un matiz de color granate, de clara vocación rupícola. Enraiza directamente en pequeñas fisuras de la roca, aunque sean soleadas. Sus hojas son estrechas y lanceoladas, de unos 2 cm de longitud. Al observar el pétalo central laciniado de su flor, se descubre que se trata de una polígala, congénere de la polígala calcárea de los prados y claros del bosque.
Por algún error arrastrado durante años, algunos libros describen la pequeña flor de la polígala de roca como de color blanco verdoso. En realidad, tal como muestran las imágenes, el color de la flor es rosado, mientras que su fruto posterior sí tendrá verdaderamente el color blanco verdoso.