La reseda blanca (Reseda alba ssp.alba) es una hierba grande, de hasta 1 metro de altura a pesar de ser anual o bienal, la más frondosa entre las especies del género Reseda que viven en Cataluña. Da nombre a la pequeña familia de las resedáceas, cercana a la más conocida y extensa de las crucíferas o brasicáceas.
Tiene hojas compuestas, pinnatipartidas o liradas, con numerosos pares de folíolos desiguales, el raquis alado y estípulas en la inserción en el tallo; mucho mayores las de la base que las de la parte alta del tallo. La reseda blanca saca racimos simples, altos y estrechos cuando están plenamente desarrollados, erectos, con numerosas flores identificativas del género Reseda. Las flores, sostenidas por pedúnculos cortos que dan a la inflorescencia aspecto de espiga, poseen 5 sépalos, 5 pétalos blancos recortados hasta la mitad en 3 lacinias, entre 10 y 12 estambres con anteras grandes y un ovario en el centro. El fruto es una cápsula grande que se abre por 4 dientes apicales.
En la comarca de Bages, la reseda blanca crece en solanas, en particular en los terrenos de suelo pobre y escaso sobre margas rojas y yesosas de la formación geológica Artés. Reseda alba ssp. alba encuentra estas condiciones en los cerros que limitan el Pla de Bages por el norte. Además del centro de Cataluña, Reseda alba ssp.alba se encuentra, más abundante, en las Islas Baleares y en el sur del País Valenciano. En la depresión del Ebro crece Reseda alba ssp.gayana, menor que la ssp.alba.
La reseda blanca es una planta de los romerales sobre terreno erosionado o muy pobre. En los ambientes ruderales de la comarca de Bages pueden encontrarse 3 especies más del género Reseda. La más común es R.phyteuma, menor que R.alba, con sus pétalos recortados en lacinias más estrechas y conocida popularmente en catalán como pebrots de ruc por la forma de los frutos, R.lutea con pétalos amarillos y R.luteola, menos común, con los pétalos igualmente amarillos pero las hojas simples.