Seta de tocones

Lyophyllum decastes

La seta de tocones (Lyophyllum decastes [= L.aggregatum]) nace en grupos densos o flotas de individuos algo unidos por la base del pie, en lugares herbosos cerca de troncos caídos, rizomas o raíces de árbol en descomposición. Es más habitual encontrarla en los parques o en los márgenes de caminos forestales que en el interior del bosque. A pesar de su nombres populares en catalán de “gírgola de bruc” o “flota de bruc”, no está relacionada con los brezos.

La seta de tocones tiene el sombrero normalmente de entre 3 y 8 cm de diámetro, convexo, no siempre completamente circular sino con el margen sinuoso, y cubierto de una cutícula gruesa, de color entre marrón oscuro y ocre, homogéneo o con fibrillas radiales si el ejemplar empieza a envejecer, dejando un ribete blanco muy fino en el margen. Por debajo, las láminas son blancas, densas, libres o adnatas junto al pie y con lamélulas intercaladas cerca del margen. El pie puede alcanzar los 15 cm y es relativamente grueso, de sección circular, macizo, grande en proporción al sombrero y de color blanco con fibrillas ocres. No siempre el pie es cilíndrico, puede ser también acodado o curvado para adaptarse al espacio existente para levantar el sombrero.

La seta de tocones es comestible apreciada, de gusto suave, aunque no le conocemos tradición de recolección y consumo en las comarcas de Cataluña Central.

El género Lyophyllum se había clasificado hasta hace unos pocos años en la familia Tricholomataceae del orden Trichlomatales, pero estudios genéticos recientes han motivado la creación de la familia propia Lyophyllaceae dentro del orden Agaricales.

[fotos Montserrat Porta y Jordi Badia]