La culebra de escalera (Rhinechis scalaris [= Zamenis scalaris, Elaphe scalaris]) es un colúbrido frecuente en el Bages que puede llegar a medir 150 cm de largo. Cuando es joven hace honor a sus nombres específico y popular porque muestra efectivamente un dibujo en forma de escalera en el dorso -en las imagénes de 2ª, 3ª y 4ª-, que se transforma en dos bandas longitudinales oscuras cuando es adulta -en la imagen 1ª-. Tiene la cabeza pequeña, redondeada y poco diferenciada del cuello, con el hocico un poco afilado. Vive en ambientes soleados y no es extraño que se suba a los árboles.
Los adultos se alimentan de pequeños mamíferos y de pájaros (especialmente de los de los nidos), mientras que los jóvenes comen saltamontes y otros animales de tamaño similar. Es un reptil agresivo, que sopla de manera espectacular al sentirse amenazado, y es fácil que muerda con violencia si se lo intenta coger.
Tradicionalmente, en el campo, a la culebra de escalera se le han atribuido propiedades medicinales, y con ella se ha preparado caldo, aceite y ungüento.
Como otros ofidios, bastantes culebras de escalera mueren atropelladas en los caminos y carreteras, ya que utilizan el asfalto para calentarse.
Su área de distribución incluye Menorca, el sureste de Francia y la península Ibérica excepto en la franja húmeda que va del País Vasco a Galicia.
[fotos Florenci Vallès (1ª y 4ª), Montserrat Porta (2ª) y Just Serra (3ª)]