Opuntia engelmannii var.linguiformis es una especie de cactus, al que podríamos denominar cactus lengua de vaca, cercano a la conocida chumbera (Opuntia maxima [= O.ficus-indica]), parecido a primera vista pero que un observador perspicaz distinguirá porqué sus palas o cladodios son de un verde más azulado, no tan gruesos y, especialmente aquellos que están situados más arriba, son alargados como una lengua. Estos cladodios pueden superar los 40 cm de longitud y son más anchos en la base, unos 10-15 cm, que en la punta. Las aréolas de los cladodios llevan un máximo de 8 espinas de color amarillo pálido y de hasta 6 cm de longitud, aunque a menudo solo tienen una. O.engelmannii var.linguiformis alcanza 2 o 3 metros de altura.
Las flores grandes y con numerosos pétalos amarillos aparecen alineadas en la arista de los cladodios. Estas flores se transformarán en unos higos chumbos ovoides, de color púrpura intenso al llegar a la madurez.
O.engelmannii var.linguiformis se reproduce fácilmente por esqueje, con lo que se esparce si se encuentra a gusto donde fue inicialmente plantado.
O.engelmannii var.linguiformis es originario del estado de Tejas y del norte de Méjico.
Existen otras variedades de O.engelmannii, aunque por ahora la única que hemos encontrado subespontánea en la comarca de Bages a partir de su uso en jardinería es esta variedad linguiformis. Crece en terrenos áridos e iluminados. Existen poblaciones extensas en la cara sur de la colina coronada por el castillo de Fals (Fonollosa), (fotos 1ª y 2ª), y junto a la ermita de Sant Jaume de d’Olzinelles (Sant Fruitós de Bages), (foto 3ª).
Además de ser un cactus cultivado por motivos estéticos, Opuntia engelmannii var.linguiformis tiene otras aplicaciones. Sus higos chumbos son comestibles, como los de la chumbera (O.maxima). Sus cladodios pueden comerse directamente cuando son aún muy pequeñitos y tiernos como habas. Finalmente, el líquido contenido en los cladodios mayores se utiliza con finalidades cosmética y medicinal.
No hemos observado afectación de la cochinilla del carmín (Dactylopius coccus) en el cactus lengua de vaca (O.engelmannii var.linguiformis).
[fotos Montserrat Porta y Jordi Badia (1ª y 2ª) y Jordi Badia (3ª)]