Tamarilla

Helianthemum hirtum

La tamarilla (Helianthemum hirtum) es una mata pequeña de la familia Cistáceas, con pilosidad blanca como su adjetivo específico hirtum indica, y flores amarillas relativamente grandes y vistosas.

La tamarilla es leñosa y perenne, a pesar de sus discretos 20-30 cm de altura. Las hojas se disponen opuestas; tienen un pecíolo de 1 mm y un limbo ovado o elíptico de unos 20 mm de longitud por unos 3 mm de ancho, color verde en el anverso y blanquecino en el reverso debido a la abundancia de pelos, los márgenes revolutos y el nervio central hundido en el anverso y resaltado en el reverso. En la inserción de cada hoja se encuentran 2 estípulas elípticas de 1/3 de la longitud de la hoja correspondiente.

Las flores tienen un calículo de 3 piezas ovadas pequeñas y un cáliz de 3 sépalos, igualmente ovados aunque mayores, con costillas o nervios longitudinales resaltados y rojizos. La pilosidad blanca es abundante en los sépalos, tanto en las costillas como en el espacio intercostal. El capullo cerrado tiene las puntas de los sépalos algo enrolladas. Cuando el cáliz se abre, descubre una corola de 5 pétalos amarillos de 5-10 mm, un haz de estambres también completamente amarillos y, en el centro, un pistilo con estigma plano.

La tamarilla vive en los romerales, en terrenos soleados.

La tamarilla no es la única especie del género Helianthemum con flores amarillas presente en la flora de las comarcas de Bages y Moianès. H.oelandicum tiene las flores más pequeñas. H.nummularium, la jarilla o perdiguera, es más grácil, mucho menos piloso y sus hojas no son revolutas. H.syriacum, el romero blanco, es una planta más robusta, con las hojas de color azulado y cuya distribución en estas comarcas se limita al extremo suroeste de El Bages.

[fotos Jordi Badia]