Las hembras de Anthophora crinipes -en las imágenes en una flor de amapola (Papaver rhoeas)– son abejas de tamaño medio que miden de 12 a 13 mm de largo. Tienen la cara oscura, pero presentan una pilosidad blanquecina con tonos marrón claro. En las patas posteriores las escopas son blancas, carácter que sólo se puede apreciar si van poco cargadas de polen, como en el caso de la foto 2a. En las tibias posteriores también destacan unos espolones marrón oscuro. Recolectan polen de plantas muy diversas, pero tienen predilección por las lamiáceas, boragináceas y asteráceas, y su período de vuelo va de Abril a Julio.
A. crinipes nidifica en el suelo, a veces en agregaciones grandes. Excava sobre un terreno llano, en lugares secos y pobres en vegetación, y construye pequeñas torres de varios centímetros de altura en la entrada del nido. A veces también nidifica aprovechando las grietas del suelo. Los nidos pueden ser parasitados por la abeja cuco Melecta luctuosa.
A. crinipes tiene una distribución paleártica que va desde Portugal hasta Asia Central. En la región mediterránea esta abeja tiene dos generaciones al año.
[fotos Xavier Adot]