La seta diente sangrante o simplemente sangrante (Hydnellum peckii) es algo sorprendente, una extraña criatura del bosque. Cuando es joven es una masa aterciopelada de color gris claro con matices azules y rosas que segrega gotas de líquido rojo o granate, como si sangrara. Al crecer interrumpe la secreción de líquido, toma forma irregular de diente o de concha con pie corto, plano y excéntrico, por arriba pierde su terciopelo pasando a un tono crema progresivamente más oscuro y por debajo descubre un himenio de agujas largas. Las imágenes muestran la secuencia de crecimiento de la seta sangrante. Al completar su desarrollo, la seta sangrante pierde su encanto.
El hongo diente sangrante es micorrícico. Su distribución es amplia en el hemisferio norte; es particularmente conocido en el área noroeste de América, pero es escaso en la comarca de Bages. Lo hemos hallado en el área de Fontfreda (Mura), en el Parque Natural de Sant Llorenç del Munt i l’Obac, en un bosque de encinas y robles.
El líquido rojo que secretan los ejemplares jóvenes de Hydnellum peckii, como atendiendo a la teoría del signo que podría ver en él una hemorragia, al contener atromentina posee precisamente la propiedad anticoagulante de la sangre.
[fotos Jordi Badia]