El vendaval del sábado 24 de enero del 2009 en toda Cataluña, también en la comarca de Bages, fue realmente excepcional por su intensidad, su duración y su extensión. El vendaval del oeste duró unas 12 horas. En la mayoría de observatorios de Cataluña, incluyendo los de las áreas tradicionalmente poco ventosas, se registraron ráfagas de viento superiores a los 100 km/h. Este vendaval causó destrozos en los bosques, en particular en los de la comarca de Bages que, a pesar de ser muy considerables, quedan disminuidos al compararlos con los sufridos en las comarcas vecinas de Anoia, Baix Llobregat y Alt Penedès. Los pinos altos son los árboles más perjudicados, en especial los que sobresalían en las lomas, los que quedaron aislados tras incendios u otras perturbaciones anteriores y aquellos cuyas copas despuntaban por encima de la masa continua de encinar en el parque natural de Sant Llorenç del Munt i L’Obac. El vendaval ha destruido muchos pinos, bien arrancados de cuajo, bien rotos por el tronco. El viento también ha tumbado encinas en zonas rocosas, junto con el trozo de tierra en donde enraizaban. También los troncos muertos que se mantenían en pie, se encuentran ahora en el suelo.
En parte, los destrozos por el vendaval del 24.01.09 no han sido más cuantiosos en los bosques de la comarca de Bages porqué habían sido afectados ya los vendavales de los días 14.09.1999 y 17.08.2003 -aunque ninguno de los dos tuvo la extensión del presente del 24.01.09- y la nevada de enero del 2006.
Las imágenes muestran árboles tumbados por el viento el 24.01.09 en el parque natural de Sant Llorenç del Munt i L’Obac; en la 1ª un pino piñonero cerca de la loma de Els Emprius, en la 2ª pinos carrascos en La Vall y en la 3ª una encina centenaria en las rocas de la Coca descalzada llevándose solidariamente consigo algunos acebos jóvenes.
[fotos Jordi Badia]
- Ver el artículo Pertorbacions, en catalán, de Jordi Badia.