La población de Calders está situada sobre un potente estrato de roca calcárea, originada por una barrera de arrecifes de coral en el período Priaboniense Inferior (Eoceno, 35 millones de años). Estratigráficamente, el conjunto corresponde al miembro Tossa de calizas, el más alto de la formación geológica Santa Maria de rocas sedimentarias marinas, en contacto ya por debajo con la formación Cardona de evaporitas o con la formación Artés de areniscas, margas y otros tipos de roca sedimentaria de origen continental y color rojizo.
Precisamente en el área de Calders es donde las calcáreas arrecifales de La Tossa están mejor representadas. El valle del río Calders pone al descubierto este estrato que, por ser más duro, se mantiene resaltado en el relieve. El estrato combina capas de caliza con nódulos con otras de grano más fino. Otra particularidad es su riqueza en fósiles, particularmente de corales.