Masa de yeso en Suria mostrando la forma de lapiaz por la disolución del agua.
La solubilidad del yeso en 100 gramos de agua es de 0,255 gramos, una solubilidad mucho menor que la de la sal común (36,0 g) pero muy superior a la del carbonato cálcico (0,0006 g). Por tanto, la velocidad de disolución cárstica del yeso está a mitad de camino entre la rapidísima en las masas de sal común –se aprecia a los pocos años del vertido en las escombreras salinas de la minería de potasa- y la lenta y paciente en la roca caliza o en los conglomerados con cemento calcáreo.
La masa de yeso de la imagen, obtenida en el cruce entre el camino hacia Ribera de Coaner y la carretera antigua C-1410z, ha llegado a la superficie por el ojal del anticlinal-falla de Balsareny, conocido aquí localmente como falla de Mig-Món.
[foto Jordi Badia]