La lagartija común o ibérica (Podarcis hispanica [= P. hispanicus]), a la que vemos tomando el sol entre las piedras, es esbelta con su cuerpo de 6,5 cm y la cola de longitud doble. El patrón de coloración es muy variable entre individuos y poblaciones; en la parte ventral dominan los tonos claros mientras que en la dorsal dominan el gris y el castaño adecuados para el camuflaje, con líneas poco contínuas oscuras en el dorso y claras en los laterales.
La lagartija común es la que posee distribución más extensa en Cataluña, englobando la comarca de Bages por entero. En cambio la lagartija de pared (Podarcis muralis), una especie muy similar, solo se encuentra en la parte norte del Bages.