El marrubio (Marrubium vulgare) es una hierba perenne de la familia Labiadas que no llega al metro de altura, de color claro debido a la pilosidad, que crece en lugares humanizados o frecuentados por el ganado.
Las hojas poseen limbo grueso, de contorno redondeado de cerca de 3 cm de diámetro, con el margen festoneado y la base atenuada hacia el pecíolo que alcanza a lo sumo 3 cm. La nerviación constituye una red grabada en el anverso. Como es norma de las Labiadas, las hojas se disponen en pares opuestos en el tallo cuadrangular, alternando 180º entre de un nudo al siguiente. Las flores nacen en verticilos densos, con flores numerosas, en la axila de los pares de hojas de la parte alta del los tallos. Las flores tienen un cáliz largo en forma de campana terminado en 10 dientecillos variables y una corola tubular blanca abierta en dos labios, superior e inferior, que contiene los estambres y el pistilo.
El marrubio es una planta común y bien distribuida. En terrenos más húmedos, el marrubio convive a menudo con el marrubio negro (Ballota nigra ssp.foetida), este último con flores púrpuras y más estirado.
El olor del marrubio es poco agradable. Sus antiguos usos medicinales van perdiéndose.
[foto Jordi Badia]