Aciano

Centaurea cyanus

El aciano (Centaurea cyanus) es una hierba de la familia de las compuestas que salpica los sembrados de color azul violáceo. Se trata de una planta adventícia cuyo ciclo vital es sincrónico al de los cereales cultivados.

El aciano posee tallos débiles con hojas estrechas, sésiles y de tamaño y dentado decrecientes de abajo a arriba, las hojas más bajas y grandes pueden tener folíolos laterales pequeños, mientras que las hojas superiores menores tienen márgenes casi enteros.
Los tallos terminan en un capítulo solitario. El receptáculo parece una pequeña alcachofa por su forma ovoide de unos 10 mm de altura por 5 mm de diámetro máximo y por la disposición ordenada de sus brácteas romboidales, verdes con un ribete oscuro, escarioso y laciniado. Las flores son todas del mismo bello color azul violeta, aunque de dos tipos por su forma. Las flores externas poseen una corola simpétala grande, con un tubo largo que se abre en 5 lóbulos; pero estas flores externas son estériles, su función es realzar el aspecto estrellado del capítulo. Por el contrario, las flores del centro del capítulo tienen menor tamaño y son fértiles; su fruto termina en un vilano como si se tratara de una brocha de afeitar.

El aciano crece en áreas removidas, además de prosperar en los sembrados. Prefiere los terrenos arenosos y ácidos, por lo que en la comarca de Bages, de suelos más bien básicos, resulta más frecuente en taludes y áreas en las que se han aportado tierras que en los campos.
Las poblaciones de aciano, como las de tantas otras plantas adventicias de los sembrados, han disminuido notablemente en todas partes, en particular en la comarca de Bages, debido a la aplicación durante años de modernas prácticas agrícolas, entre ellas el uso de herbicidas y la selección de las semillas antes de la siembra.

Las flores de aciano se utilizan en infusiones, a menudo como componente de mezclas con presuntas propiedades múltiples, y como calmante de irritaciones oculares y conjuntivitis. A pesar del uso extenso del aciano en herboristería, la evidencia de su efectividad es escasa.

Por su belleza y su uso medicinal, el aciano es una planta candidata a ser favorecida en pequeños espacios humanizados tales como alcorques, márgenes e isletas viarias.

[fotos Jordi Badia (1ª) y Montserrat Porta (2ª)]