El alfilerillo de pastor (Erodium cicutarium) es una delicada planta anual, muy común, emparentada con los alfileres de roca (E. foetidum ssp. rupestre, E. foetidum ssp. glandulosum). Habitualmente aparece en yermos y zonas de suelo delgado.
Sus tallos son débiles y pilosos. Las hojas con compuestas pinnadas, con los folíolos a su vez lobulados o divididos siguiendo el modelo de las hojas. Sus flores, como las de las demás geraniáceas, son muy atractivas con sus 5 sépalos mucronados y sus 5 pétalos rosados, los dos superiores algo menores insinuando una tendencia a la simetría bilateral. En la foto 3ª se aprecia la proterandria, es decir, la maduración primero de la parte masculina de la flor -en la foto, las dos flores de los extremos con los estambres maduros- y en una etapa siguiente, cuando los estambres ya no son funcionales, la maduración de la parte femenina -en la foto, la flor central con los 5 estigmas completamente desarrollados. La proterandria previene la autofecundación de las flores.
Si las circunstancias son favorables, el alfilerillo de pastor transitoriamente pueden exhibir poblaciones numerosas, convirtiendo un yermo en una constelación de delicadas flores rosadas. A menudo se observa esta situación en las lomas del PN de Sant Llorenç del Munt i serra de l’Obac.
El nombre de la planta se refiere a sus frutos en forma de alfiler, de una longitud de hasta 7 cm, muy característicos de la familia geraniáceas.