La amapola cornuda (Glaucium corniculatum) es una hierba anual de la familia papaveráceas, cercana a la amapola común (Papaver rhoeas) como demuestra la semejanza entre las flores, aunque con un fruto en forma de cuerno muy distinto. La amapola cornuda también vive en los sembrados, apareciendo en primavera. Posee hojas irregularmente pinnatipartidas de un tono característico azulado o glauco al que alude el nombre de género Glaucium, con algunos pelos erizados, largos y gruesos. Las flores, de 3-5 cm de diámetro, tienen 4 pétalos de color naranja rojizo o rojo sin llegar a ser intenso como el escarlata de la amapola común, con una mácula negra en la base. Al fructificar forma una cápsula larguísima, de entre 10 y 20 cm, a menudo más alta que el resto de la planta, que se abre en dos valvas de arriba abajo para liberar las pequeñas semillas negras, de 1,5 mm.
Del mismo género existe también la amapola marina (G.flavum), mayor y con pétalos amarillos, característica de las arenas litorales, que en la comarca interior de Bages se encuentra solo en arenales del lecho de ríos y arroyos.