Babosa amarilla

Limacus flavus (= Limax flavus)

La babosa amarilla (Limacus flavus [= Limax flavus]) tiene un tamaño de unos 10 cm cuando estira el cuerpo, entre el de las pequeñas babosas del género Lehmannia (L.valentiana, L.marginata), de su misma familia Limacidae y con los que más se parece, y el de las grandes babosas negras, gruesas y rugosas (Arion ater, Milax nigricans) de otras familias. Su cuerpo posee un matiz de color amarillo entre las numerosas pequeñas manchas marrones. También el rastro de moco que deja a su paso es amarillo o naranja. En cambio, los tentáculos son grises. El opérculo se abre en el lateral derecho del cuerpo que no se ve en la imagen 2ª.
La imagen 1ª muestra un ejemplar pequeño, seguramente un joven, mientras que la 2ª corresponde a un adulto con todas sus características

La babosa amarilla se alimenta de hongos y de vegetales en descomposición. Su actividad es nocturna, por lo que apenas se ve de día. La babosa amarilla no es una especie de los huertos que estropee las plantas cultivadas como otras especies de babosas y caracoles, sino más bien una especie de rincones húmedos de sótanos, bodegas y paredes de jardín que roe superficies donde crecen hongos, habitualmente dentro o cerca de construcciones humanes.

La babosa amarilla, como tantas otras especies antropófilas, tiene una distribución muy amplia.

[fotos Montserrat Porta y Jordi Badia]