En temporada seca se encuentran a menudo grupos numerosos de caracoles blancos o rayados longitudinalmente de tonos marrones, de color variable y tamaño medio o pequeño, adheridos a los tallos del hinojo (Foeniculum vulgare). Se trata del caracol de dunas (Theba pisana) que se pega a las superfícies con la misma mucosidad con la que cierra la abertura de la concha para no perder humedad. Puede pasar mucho tiempo en estado de reposo, esperando tiempos mejores.
El caracol de dunas pertenece a la familia helícidos, la misma que el caracol común (Cryptomphalus aspersus). El caracol de dunas es igualmente comestible, con más o menos tradición en la cocina según regiones.