Gymnosporangium clavipes es un hongo gelatinoso de la familia Pucciniaceae, fitopatógeno que necesita dos huéspedes para completar su ciclo vital: un arbusto del género Juniperus como huésped primario -en Cataluña central un enebro albar (J.oxycedrus), un enebro (J.communis), una sabina (J.phoenicea) u otra especie importada de Juniperus y plantada en los jardines- y un membrillero (Cydonia oblonga) como huésped secundario.
El ciclo vital de G.clavipes es complejo. Véase la descripción del ciclo vital en las especies cercanas G.tremelloides, G.amelanchieris y G.clavariiforme, en los que hay que sustituir el árbol o arbolillo de la familia Rosáceas por el membrillero como huésped secundario para que sea aplicable a G.clavipes.
La infección por G.clavipes al membrillero se evidencia por la aparición en algunas ramitas de un engrosamiento erizado de múltiples tubitos blancos de unos 5 mm de longitud por 1 mm de diámetro donde se producen eciosporas que infectarán arbustos del género Juniperus. La producción de eciosporas desde uno de estos engrosamientos suele durar algunos años. La ramita afectada acaba por secarse y morir a partir del punto del engrosamiento e infección. Ocasionalmente, la infección por G.clavipes puede verse también en los frutos, los membrillos, tal y como ocurre con los pomos de espino albar (Crataegus monogyna) infectados por G.clavariiforme; sin embargo, no se ha documentado la infección en las hojas.
G.clavipes, al igual que la mayoría de fitopatologías ocasionadas por hongos del orden Pucciniales o Uredinales, tiene una distribución muy amplia que alcanza prácticamente todas las áreas donde conviven ambos huéspedes, primario y secundario.
[foto Jordi Badia]