Jazmín de invierno

Jasminum nudiflorum

El jazmín de invierno (Jasminum nudiflorum) es un arbusto con ramas verdes, estriadas y genistoides, débiles y flexibles hasta el punto de poder ser dirigidas a conveniencia con fines ornamentales. El jazmín de invierno florece sorprendentemente entre los meses de enero y marzo sobre las ramas desnudas, antes de la aparición de las hojas, para quedar cubierto de esplendorosas flores amarillas que resaltan aún más por salir a escena en invierno, cuando casi no hay otras flores entomófilas, coloreadas y atractivas a la vista.

Estas flores salen opuestas en pares, aunque fácilmente una de ellas puede haberse quedado en el camino, en el lugar que corresponde a la axila de las hojas ausentes. Las flores son sésiles. Tienen un cáliz corto formado por diversas escamas libres y rojizas, una corola actinomorfa amarilla con matices naranja constituida por un tubo estrecho de alrededor de 1 cm de longitud que se abre en (5)6 pétalos ovados y con la punta marcada, dos estambres soldados al tubo de la corola y un solo estilo en el centro que termina en estigma ancho. Las flores del jazmín de invierno no son perfumadas como las del jazmín silvestre (Jasminum fruticans). En cambio, el fruto es igualmente una baya negra, aunque de forma oval.

En primavera, cuando la floración decae, nacen las hojas. Estas hojas se disponen opuestas; tienen un verde intenso a pesar de ser caducas y son trifoliadas, con pecíolo corto y folíolos elípticos de 1 a 3 cm de longitud, el central claramente mayor que los laterales.

El jazmín de invierno no es una planta autóctona, sino que es originaria del norte de China y plantada en jardines. Soporta bien el frío, no tiene requerimientos ecológicos especiales y se adapta bien al clima de la comarca de Bages. Empieza a encontrarse subespontáneo no lejos de donde ha sido plantado o manteniéndose en el lugar durante años a pesar de no recibir atenciones. En esta forma subespontánea hemos observado al jazmín de invierno en áreas de Pineda de Bages y de El Poal, en el Pla de Bages, y en el valle de Servitja (Rajadell), siempre cercano a lugares humanizados. El jazmín de invierno pertenece a la familia Oleáceas.

[fotos Jordi Badia]