Fontinalis antipyretica es el musgo de agua por excelencia, la especie de musgo más extendida por las aguas en el mundo y la más utilizada en acuarios. Se fija en las piedras de arroyos y en las paredes de canales de agua corriente, permanente y limpia, en la que vive sumergida. Forma tallos de 20 o 25 cm de longitud, con hojitas o filidios de color verde o algo amarronado dispuestos en tres hileras, ovados con la punta aguda, el margen liso y carenados como la quilla de un barco. El esporófito es poco habitual y poco visible; se trata de una cápsula con pedúnculo corto que se esconde entre los filidios. Su escasa reproducción sexual se compensa con la frecuente reproducción vegetativa mediante fragmentos arrastrados por la corriente.
Fontinalis antipyretica vive en aguas limpias y relativamente frías, en las que facilita la presencia de macroinvertebrados acuáticos. Fontinalis antipyretica es el único musgo que aparece en el magnífico libro «Plantas Medicinales – El Discórides renovado» de Pius Font i Quer. Aunque su aparición el libro de las plantas medicinales y su adjetivo específico no se deben a razones realmente científicas, sino a la tradición de la teoría del signo que, de la apetencia de Fontinalis antipyretica por las aguas frías, dedujo que quitaba la fiebre de los enfermos.
En la comarca de Bages Fontinalis antipyretica vive principalmente en canales de obra que conducen agua limpia y dulce derivada en tramos cortos de los ríos Cardener o Llobregat. Las imágenes son obtenidas en el Pla de les Hortes, en Súria, en los pequeños canales que distribuyen por la huerta el agua tomada del río Cardener antes de que su salinidad suba bruscamente por la filtración de salmuera procedente de la escombrera salina minera de Fusteret.
[fotos Jordi Badia]
- Ver el artículo Teoria del signe, en catalán, de Jordi Badia.