Saltarín de roca

Catamachilis sp.

El saltarín de roca (Catamachilis sp.) es un insecto primitivo y áptero que se inscribe en el orden microcorifios (= O. Microcoryphia, antiguamente orden Archaeognatha para designar a los insectos primitivos) y en la familia Machilidae. Si recuerda a algún insecto conocido, éste es la lepisma o pececillo de plata (Lepisma sp.), a pesar de que no comparten ni el mismo orden.
El saltarín de roca es un insecto extraño; posee un cuerpo alargado y segmentado de 8-10 mm sin contar los 3 cercos del extremo del abdomen, el central tan largo como el resto del cuerpo. El cuerpo está cubierto de grandes escamas de color cobre que alternan con otras negras y que, por una parte y si se mira con atención, le dan aspecto acorazado primigenio como el del crustáceo Triops cancriformis y por otra, si no se le presta suficiente atención, lo convierten en invisible por su mimetismo preciso sobre la roca donde vive. Se le encuentra en zonas rocosas y pedregales. Su comportamiento es discreto buscando refugio en las sombras y las grietas; pero si nota peligro, además de correr rápidamente, puede saltar súbitamente hasta 40 cm para alejarse, como si se tratara de una langosta. El saltarín de roca se alimenta de líquenes, musgos y restos vegetales que encuentra en la roca. A veces, principalmente al atardecer, muestra comportamiento gregario.

En la imagen 1ª, el saltarín de roca en su habitual posición de reposo con las antenas dirigidas hacia atrás y el cuerpo relajado, mientras que en la imagen 2ª está tenso, presto al salto.

Hay 3 especies de Catamachilis citadas en Cataluña, C.amara, C.ancorata y C.clipeata, además de otros géneros de la misma familia Machilidae, todos ellos conocidos colectivamente como saltarines de roca, poco conocidos y de difícil discriminación. El ejemplar de las imágenes obtenidas en l’Era dels Enrics de la sierra de l’Obac (Mura), atendiendo a su patrón de color se trata probablemente de Catamachilis ancorata.

[fotos Montserrat Porta y Jordi Badia]