



La filoxera de los Quercus (Phylloxera quercus) es un pulgón de color naranja que ataca exclusivamente a los árboles y arbustos del género Quercus, principalmente a los robles, aunque también a los quejigos, a las encinas y a las coscojas. En realidad no se trata de una sola especie, sino de algunas especies: Phylloxera quercus, P.quercina, P.coccinea y P.glabra, y quizás aún de alguna más entre las descritas de los Quercus de Norteamérica. Probablemente, la especie de las imágenes sea Phylloxera quercus.
La filoxera de los Quercus, que podemos llamar igualmente filoxera del roble, se mueve por los reversos de las hojas del roble -o de la encina o la coscoja-, desde donde clava su pico y chupa la savia. En cada punto donde la filoxera ha picado se forma una mancha naranja de necrosis, de 1 mm de diámetro, que atraviesa la hoja siendo visible también por el anverso. La filoxera pica aquí y allá, dejando la hoja punteada de naranja.
El ciclo vital de la filoxera de los Quercus es complejo, involucrando distintos estadios y formas biológicas. En una hoja infestada pueden encontrarse a la vez los huevos de color amarillento, las ninfas de color naranja que suelen ser los individuos más numerosos, las hembras ápteras partenogenéticas, también de color naranja, que multiplican rápidamente la infestación, y los individuos sexuados alados y de tono más oscuro. La imagen 1ª muestra por el anverso y por el reverso una hoja de roble pubescente (Quercus pubescens) afectada por filoxera. La imagen 4ª muestra el detalle del reverso de una hoja infectada donde se ven huevos, ninfas y dos adultos alados.
A menudo se ven también hormigas de la especie Crematogaster scutellaris que patrullan por la zona protegiendo a la filoxera de los Quercus.
La infestación por filoxera puede causar la caída de hojas por necrosis y perjuicios significativos al roble. La afectación por filoxera de los Quercus es más habitual en los robles de los parques y jardines urbanos que en aquellos del bosque. La menor presencia en zonas urbanizadas de depredadores de pulgones, como son los coccinélidos (Coccinella septempunctata, Propylaea quatuordecimpunctata…) y otros insectos, explica la mayor susceptibilidad de los robles de ciudad a su filoxera.
La filoxera de los Quercus está relacionada con la conocida y temida filoxera de la vid (Phylloxera vastatrix [= Viteus vitifoliae]) que devastó completamente los viñedos de la comarca de Bages a finales del siglo XIX.
[fotos Montserrat Porta y Jordi Badia]