


El gusano cortador (Agrotis ipsilon), denominado así por su acción sobre las plantas, o gusano grasiento por su tacto suave y resbaladizo, es una mariposa nocturna perteneciente a la familia Noctuidae que se ha convertido en una plaga mundial en los cultivos de pimientos y berenjenas, cebollas, maíz y otras plantas herbáceas cultivadas.
La oruga -en las imágenes- mide unos 4 cm en sus estadios finales. El dorso y los costados tienen color oscuro poco definido entre marrón y gris, mientras que la parte ventral es verde. Posee ocelos negros en el dorso y en las líneas laterales siguiendo una distribución característica. La cabeza es semiesférica. Su cuerpo es blando, por lo que se le marcan pliegues o michelines. La oruga vive en el suelo, saliendo de noche para alimentarse de tallos, hojas y frutos verdes de la huerta. Puede roer el cuello de la raíz de la planta, echándola a perder por completo. Es habitual que penetre en el tallo de las cebollas o en los pimientos aún verdes. Al vivir en el suelo y salir de noche, suele pasar desapercibida. La oruga y los daños causados en la huerta son comparables a los de la oruga del tomate (Helicoverpa armigera), otra especie de la extensísima familia Noctuidae.
El adulto es una mariposa nocturna de color oscuro discreto con unos finos dibujos trazados en negro en las alas anteriores que recuerdan la letra épsilon (ɛ), de donde proviene su adjetivo específico.
[fotos Montserrat Porta y Jordi Badia]